El arquero del Deportes Tolima, Álvaro Montero, fue sancionado por dos meses por dar positivo de dopaje con isometepteno, sustancia prohibida por la Agencia Mundial Antidopaje, que según el jugador había consumido para tratar la migraña.
Son las cosas que pasan, no se puede decir a ciencia cierta que el jugador las haya consumido adrede aun sabiendo lo que estas le acarrearían si fuese descubierto, lo real es que salió positivo y no tiene nada para alegar a su favor, los deportistas saben que deben y que no deben hacer, si el jugador estaba indispuesto lo más lógico es asistir al cuerpo médico para que le diagnostiquen las drogas no estarse prescribiendo, es allí donde surge la duda.
No se entiende porque este caso lo han dilatado tanto cuando a otros jugadores les han impuesto sanciones más severas y no se han demorado en dictarlas, y no tienen derecho a refutar, por el contrario tienen que quedarse callados.
La ley es la misma para todos y no se puede medir con diferente rasero por el hecho de ser consentidos de algunos políticos, Mindeportes tiene que pronunciarse o será que puede más el miedo que la honestidad, allí les queda ese chicharrón.