El torneo colombiano sigue noticias, la salida de técnicos de equipos que no llena las expectativas y que por los malos resultados tiene que prescindir de ellos, es el caos de Harold Rivera que los directivos del cuadro Patriotas.
En un comunicado, el equipo boyacense manifestó, Patriotas les informa a los medios de comunicación y a toda la hinchada lancera que el profesor Harold Rivera ya no seguirá siendo el director técnico del equipo profesional.
Agradecemos al profesor y a todo su cuerpo técnico el trabajo y esfuerzo en la búsqueda de los mejores resultados para la institución. Le deseamos lo mejor en este nuevo camino y en todos los proyectos que se involucre a futuro.
Harol Rivera se va del equipo, dirigió 31 partidos, ganó seis, empató seis y perdió 19, con un rendimiento de 23,34 %, lo cual era insostenible su estadía.
En su reemplazo llega Dairon Pérez para tratar sacar de la crisis en la que se encuentra el equipo.
Ya son seis los técnicos descabezados los cuales han sido licenciados por los equipos unos por malos resultados y otros por caprichos de los directivos tratando de dar a conocer que ellos son que ponen la plata, el billete, el money y son los dueños absolutos de los equipos y que no aceptan intromisiones de nadie.
Entre los estrategas que han salido están, Alfredo Arias, de Independiente Medellín, Néstor Craviotto, de Jaguares, Pablo Repetto, en Atlético Nacional, Arturo Reyes, de Junior, Alexis Márquez, de Envigado y Harold Rivera.
El torneo no termina y ya se ventilan posibles técnicos por salir, el que está calentito para irse es Hernán Torres del Súper Dépor este personaje no ha dado pie con bola, lo ha convertido en un equipo sin alma, sin carácter y sin ganas de salir adelante.
Lo más seguro es que le den el ácido, ha sido un placer tenerlo en el equipo, piquito y adiós, que le vaya bien como siempre los despiden en los comunicados. Se rumora que están en conversaciones con José Cheché Hernández para que sea el salvador del equipo.
Hay situaciones que son inmanejables e insostenibles de ver como los equipos no dan resultados y se hunden cada vez más en el fondo del fango, sin haber nadie que trate de salvarlos y llevarlos a flote a un lugar seguro, para evitar que se sigan hundiendo más.
Lo cierto de todo es que hay rivalidad directiva en unos equipos y hace que muchos no salgan adelante, es más grande el egoísmo, la sed de poder y la venganza que lograr acercamientos para juntos darle la gloria que se merecen estos equipos.