Real Madrid derrotó a Barcelona 3–2 en la prórroga y logró meterse en la final de la Supercopa de España, en el estadio King Fahd de Riad los goles los consiguieron Vinicius, Karim Benzema, Fede Valverde par los catalanes lo hicieron Luuk de Jong y Ansu Fati.
El cuadro merengue espera su rival del encuentro que disputarán Athletic de Bilbao y el Atlético de Madrid.
El clásico español esta vez fue para el cuadro banco que desde el comienzo mostró que quería seguir su camino a conquistar la copa, los dirigidos por Xavi no fueron capaces de interponerte el estilo de juego de los dirigidos por Ancelotti.
A pesar de tener ganas de imponerse en el partido los catalanes no muestran un estilo de juego definido, hay que esperar al nuevo entrenador que muestra y cuál va a ser su modelo de juego, hasta el momento no se ven progresos, un estratega normalito que no da con la talla de este gran equipo, se le tiene que dar tiempo para ver si es capaz de estar al frente, de lo contrario los resultados lo dirán y los que van a respaldar su trabajo porque si no da pie con bola, con pena y dolor le tiene que dar el ácido, ha sido un placer tenerlo.
Y es de simple lógica porque las empresas consiguen persona para que la saquen adelante y que la coloquen en un lugar competitivo, de eso se trata de lograr que todos trabajen para lograr el objetivo, por ello todos tienen la obligación de estar en la misma sintonía para alcanzar la meta deseada, nadie contrata personal para que lleguen a hacer nada y que se dediquen a ser sanguijuelas que desangran cada día la empresa.
Muchos directivos y dueños de equipos esperan y le dan tiempo para que los estrategas muestren su trabajo, pero desafortunadamente estos no se acoplan a lo que buscan y los malos resultados hablan por ellos y allí donde las cosas se ponen duras y críticas y no hay otra alternativa que dar por terminado el contrato porque no fue capaz de exponer lo que traía para desarrollar.