Los cobardes y miserables, son valientes atacando mujeres y niños

Los cobardes y miserables, son valientes atacando mujeres y niños

Terminado el encuentro entre Uruguay, y Colombia por el paso a la final de la Copa América en las tribunas se presentaron ciertas agresiones de aficionados colombianos contra familiares de los jugadores charrúas, Marcelo Bielsa, técnico del seleccionado uruguayo no se contuvo y rechazó las posibles sanciones contra sus pupilos que se vieron involucrados en estos incidentes.

Marcelo Bielsa manifestó, Los jugadores reaccionaron como lo hubiera hecho cualquier ser humano. Si usted ve que hay un proceso para que eso que sucedió no suceda, si usted ve que hay un proceso para que se atenúe, es decir, una puerta de escape, y las dos cosas no suceden y están agrediendo a su mujer, a su madre, a un bebé, a su esposa, a su hermana, ¿qué hacen? ¿Van a sancionar a los que los fueron a defender?

No se dan cuenta de que esos jóvenes jugadores uruguayos, si no hubieran hecho eso, habrían sido condenados por nosotros mismos. ¿Cómo no vas a defender a tu bebé, a tu hermana, a tu mujer? ¿De qué sanción me hablan, lo que hay que decir es cuánto tardarán en pedirles disculpas?

El motivo que provoca la reacción es parte de la interpretación que se hace de la reacción que se está evaluando. Cómo puede alguien preguntar si tengo temor por las sanciones, cuando la única lógica que impera es una madre de familia con bebé en sus brazos, mujeres, esposas, madres, agredidas por los espectadores.

La protección del espectador no tiene nada que ver con el equipo de fútbol, ni la federación. Lo que tendría que preguntar si tuviera un mínimo de sentido común es si los jugadores han recibido las disculpas, para salvaguardar la responsabilidad. Cómo voy a temer una sanción que es imposible de que suceda. Lo único que quiero decir es que los jugadores reaccionaron como lo hubiera hecho cualquier ser humano.

Están agrediendo a su bebé, a su madre, a su esposa. La pregunta también actúa de manera cómplice; todo esto no lo tengo que decir yo. Cuando hay un acto desproporcionado, violento, por supuesto que quien va a estar a favor de una reacción violenta, pero lo primero es ver a qué corresponde la reacción.

Lo único que importa es que haya un procedimiento para que no suceda, y que, si sucede, que haya un procedimiento para que haya una puerta de escape.

En los medios hay un porcentaje de ellos que no dice lo que deben; ese porcentaje se calla. Este señor que se va capitaliza con su conducta todo el porcentaje que se enfrenta a esto. Esto merece un solo trato. No es preguntar si me temo a las consecuencias, la pregunta correcta es si les pidieron disculpas a los jugadores. En prevención, estamos en Estados Unidos, el país entre comillas de la seguridad. Luego, si la prevención falla, había un recurso, la puerta de escape. Y me hablan de sanciones. Lo que los libera es que no tuvieron otra opción que reaccionar así.

En un país que fue capaz del Fifagate, ahora resulta que hay que echarles la culpa a los jugadores. Estados Unidos, cuando sintió que sus intereses estaban siendo atacados, creó el Fifagate, con el FBI, hicieron lo que hicieron, pero era por sus intereses. Acá, en la Copa América no pasó nada, acá no pasó nada, las canchas, esto fue una fiesta extraordinaria, estadios llenos, una competitividad, arbitraje, no hay nada de lo que quejarse.

La sanción no tiene que ser para los futbolistas, sino para los que los obligaron a actuar así. Esto es una caza de brujas. Es una vergüenza.

Ya va siendo hora que todos en el fútbol salgan a denunciar todas las irregularidades que se comenten y que muchos callan por el miedo, y no estamos hablando de la prensa porque en muchos países por no decir en todos, la prensa está arrodillada al servicio de los dirigentes deportivos, cuando estos levantan la mano los medios se callan y salen como el perro con el rabo entre las patas.

Que bueno que la justicia identifique a los valientes seguidores colombianos que se sintieron machotes atacando mujeres y niños. Estos miserables cobardes son grandes y se envalentonan cuando están en grupo, en manada y estando armados, porque solos son unas simples pelotas, unos pinches cobardes.

Ya es hora de que el mundo se levante y que acabe con el altísimo grado de corrupción que se ha tomado el fútbol, será que el mundo va a seguir aguantando a estos mandilones, afeminados dirigentes hacer los que les da la gana, se hace un llamado al mundo para que salgan personas que lo defiendan y que pongan en cintura a todos estos villanos que se mofan de todos porque están seguros de que son intocables y que nada ni nadie puede ponerles freno.


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