Los jóvenes luchan por cambiar la mentalidad de las generaciones que se durmieron y que se niegan a despertar, generaciones conformistas, indolentes, por tener un empleo, un plato en la mesa, un techo alquilado donde pasar las noches, una muda de ropa creen que ya alcanzaron todo y se sumen en sus conformismos, que se resignan a vivir con la afujías sin pensar en levantarse y comenzar a exigir lo que les pertenece, lo que les han quitado los linajes gobernantes, que mutan peor que un virus abarcando con sus tentáculos todos los rincones del país para adueñarse de los recursos, más voraces que un enjambre de langostas que arrasan con todo lo que encuentran a su paso.
Eso es lo que no quieren dejar, no quieren soltar el poder porque se les acaba la teta que los mantiene vivos, se aferran a los escritorios de patas y manos para poder permanecer anclados chupando la sangre del pueblo como sanguijuelas, tal es el miedo que han censurado todas las redes para que el mundo no se entere lo que realmente pasa en el día a día de los que salen a manifestar y a reclamar de todo lo que se han adueñado.
Lo importante de todo es que hay personas que buscan cambiar la mentalidad de los demás, estos hacen todo para sacar el pueblo de su sueño, de ese invernadero que siempre los han mantenido los políticos, para lograr un verdadero cambio se tiene que trabajar duro con la gente, hacer tomar conciencia de la pésima situación en la que se encuentra el país, crear sentido de pertenencia, despertar esa ambición de luchar para rescatar lo que por siglos les han quitado, buscar la unidad del pueblo, acabar con la indiferencia, la indolencia y sobre todos a crear lazos de amor y respeto por los demás.
No se puede parar y dejar tirado todo por lo que se ha luchado, está prohibido tirar la toalla, volver a lo mismo, dar el brazo a torcer, tienen que sacar el desánimo y el pesimismo, no se puede dar marcha atrás, y olvidar a los que se fueron, a los desaparecidos, a los presos, a las mujeres que fueron violadas por policías, no hay espacio para retroceder, tienen que cada segundo dar un paso adelante, ni uno atrás, el pueblo está con estos valientes guerreros y tarde o temprano esta burda sociedad de los de la gente de bien van a caer, ese día no está lejano, ya que la nueva generación lucha incansable para no claudicar en buscar un verdadero cambio para el país.