En Brisbane, Australia, Rowan Baxter de 42 años, exjugador de rugby, encerró en su vehículo a su ex esposa Hannah Clarke, y sus tres hijos, Aaliyah, Laianah y Trey, les rocio gasolina y les prendió fuego, todos fallecieron luego se suicidó apuñalándose, después de la separación de su esposa por violencia doméstica, Baxter entró en un estado de depresión por no tener a sus hijos y haber perdido a su familia.
Muchas personas no se atreven a denunciar a sus verdugos y prefieren callar, seguir su calvario y no ponerse en el escarnio público, ya que las autoridades cuando se presentan este tipo de casos no les prestan mucha atención, no les paran bolas y otra porque la ley es muy laxa y permisiva, deja que los malos tratos se conviertan en asesinatos.
Por muy duro, por más que sufras por los problemas nunca se puede atentar contra la vida de los demás, si estás pasando por malos momentos y no eres capaz de salir solo de ellos, busca ayuda, siempre hay personas que están dispuestas a tenderte la mano y ayudarte, lo importante es no dejarse vencer por los problemas y buscar la solución para seguir adelente, recuerda que todo llega y pasa.